TENET Review

TENET es la onceava película del afamado director Christopher Nolan, quien trabajo en su escritura por cinco años. Se trata de una película de espías protagonizada por John David Washington, Robert Pattinson, Elizabeth Debicki, Kenneth Branagh y Dimple Kapadia.

Después de una misión fallida, un agente de la CIA (John David Washington) es reclutado por una organización secreta llamada TENET y con el apoyo de Neil (Robert Pattinson) intentaran detener una amenaza proveniente del futuro.

Sin duda lo más llamativo de esta película es el concepto de viaje temporal que presenta Nolan. Imposible explicarlo sin caer en spoilers, pero es importante resaltar que la visión que se expone resulta novedosa y la manera en la que es incorporada a su historia es brillante.

Nolan es conocido por tener una construcción en su narrativa que representa un cierto reto para el espectador tanto para seguir una línea de sucesos como para entender lo que está pasando realmente en pantalla, si bien “Tenet” cumple esta normativa, resulta extraño como utiliza ciertos niveles de exposición para que los mismos personajes expliquen lo que ocurre realmente en una historia, misma que luce confusa pero que al final resulta ser bastante más simple de lo que aparenta. Lo anterior lleva a pensar que quizá esta no sea una película tan bien construida como otros trabajos anteriores de Nolan.

El ritmo de la película de inicio, a pesar de tener un comienzo frenético, es tan lento y tan lleno de diálogos de exposición e informativos que cuesta mucho seguir la pista ante una serie de sucesos que hacen de la película una experiencia aburrida. Sin embargo, después de la primera hora se comienzan a ver las cosas interesantes y, a pesar de que se puede considerar que se presentan altibajos constantes en ritmo, la cinta se torna mucho más disfrutable.

Como ya se mencionó, las películas de Nolan tienden a ocultar cierta información al espectador para que él mismo logre conectar ciertos puntos y poder descubrir más adelante algo impactante en la película. En anteriores ocasiones el resultado ha sido sumamente satisfactorio, entregando plot twist y revelaciones memorables. En el caso de “Tenet” se respeta de igual forma esta temática, con la diferencia de que la gran revelación final resulta con un “payoff” de menor fuerza, resultando incluso hasta en un final que perfectamente puede ser considerado como un “Cliché”.  

La dirección de Nolan es tan impecable como siempre y en esta película se nota mucho la experiencia que posee al momento de filmar cierto tipo de tomas y secuencias que juegan mucho con los manejos de cámara. Al final se presenta algo con la calidad a la que el director nos tiene acostumbrados.

En el apartado actoral John David Washington y Robert Pattinson hacen un gran trabajo liderando esta película, ambos tienen una química bastante buena y que ayuda a sobrellevar ciertos puntos flojos de la trama, así mismo el apoyo de Elizabeth Debicki resulta una gran sorpresa al presentar una actuación muy bien lograda. No es una película que se caracterice por la brillantez de sus actuaciones, pero se podría decir que Kenneth Branagh resulta ser el mejor aprovechado con un papel que le queda perfecto en su nivel y estilo actoral.

El compositor sueco Ludwig Goransson es el encargado de la música. A pesar de que se trata de un ganador del oscar, hay que decir que es un gran bajon de nivel a comparación con lo que venia haciendo Hans Zimmer en anteriores producciones de Nolan, provocando que sea un trabajo mucho menos o nada memorable. Sin embargo, tiene su merito en poder lograr una música que se siente natural y que ayuda a poder estar mas adentrado en la cinta.

En conclusión, Tenet es una buena historia de espías caracterizada por las complejidades propias del estilo de Nolan, mismas que lo han mantenido en la élite de su profesión. Sin embargo, en el caso de Tenet estas complejidades terminan por atrofiar una película cuya historia es mucho más simple de lo que aparenta, haciendo que el resultado sumamente pretencioso y no tan satisfactorio al compararlo con los anteriores proyectos del cineasta.  

8