Pokémon: Detective Pikachu es
la primera película live action del gran fenómeno mundial que por décadas ha maravillado
a chicos y grandes con videojuegos, cartas coleccionables, anime y juguetes.
Está dirigida por Rob Letterman y protagonizada por Ryan Reynolds, Justice
Smith, Kathryn Newton, Bill Nighy y Ken Watanabe.
La historia se basa libremente
en el videojuego “Detective Pikachu” lanzado en 2018 y cuenta la historia de
Tim (Smith), un joven que, después de fracasar como entrenador Pokémon, ha
decidido tomar un trabajo común. Todo cambia cuando recibe una llamada que le
anuncia la muerte de su padre, del cual se separó tras la muerte de su madre,
por lo cual viaja a Ryme City para conocer más de lo sucedido. Mientras revisa el
departamento de su padre, Tim se encuentra con un Pikachu (Reynolds) con el
cual puede comunicarse y este lo convence de iniciar una investigación para encontrarlo,
ya que él asegura que está vivo. A ellos se unirá un Psyduck y Lucy Stevens
(Newton), una periodista que se interesó en el caso desde hace tiempo.
Ésta película es una gran
sorpresa y hay cuatro grandes motivos por los cuales vale completamente la
pena. El primero es el gran trabajo realizado para la recreación de los
Pokémon, los cuales están tan bien animados y diseñados que se puede percibir
el suave del pelaje, las brillantes escamas o lo áspero de la piel según sea el
caso, además de ser tan temibles como enormemente adorables. Se realizó una
adaptación que encaja perfecto en el mundo real pero sin perder la esencia de
cada personaje.
El segundo elemento que
destaca en la cinta es la historia, la cual está muy bien construida desde el
inicio hasta el fin, contada con un ritmo muy razonable que permite explorar
gran parte de las posibilidades que ofrecería un mundo donde los Pokémon son
reales. A pesar de no entrar de lleno en el trasfondo de cada personaje
secundario, se nos dan los datos necesarios de cada uno para poder
identificarnos con ellos. Quizá no es una historia tan memorable pero para lo
que se formó en poco menos de dos horas, es muy aceptable.
Como tercer elemento está el
humor. Detective Pikachu es de lo más divertido que se ha hecho este año y lo
es gracias a una comedia bien formulada, carente de chistes de pastelazo y
agraciada por situaciones cómicas armadas a partir de las cualidades de sus
personajes e interacciones entre ellos. También combina con éxito un humor muy noble
e inocente con chistes inclinados al doble sentido y de burla a situaciones
serias.
Por último y lo más importante
de estos cuatro pilares mencionados es Ryan Reynolds. El detective Pikachu es
un personaje grandioso y lo es gracias al carisma del actor y su habilidad para
entretener con cada una de sus lineas. Su voz encaja magistralmente con el Pikachu
y lo hace tan suyo que probablemente sea uno de los personajes por los cuales
más se le recuerde en un futuro.
Uno de los grandes puntos
flacos que existen en el cine basado en videojuegos son las actuaciones, pareciera
que los actores no se toman en serio esta clase de proyectos. En este caso pasa
todo lo contrario, Justice Smith entrega una buena actuación y su química con
Kathryn Newton es convincente, además de que esta última rescata lo que pudo
ser un personaje olvidable y convierte a Lucy en uno de los más agradables. Por
otro lado, actores como Watanabe y Nighy, los de mayor peso en la película, hacen
un trabajo discreto pero efectivo.
Ninguna película es perfecta y
el error más grande de Detective Pikachu es que su trama, a pesar de que usa
algunos plot twist, es bastante predecible, al punto de que si tienes una buena
capacidad de análisis y piensas un poco, para la media hora de película
probablemente podrías deducir lo que sigue casi a la perfección.
Otro punto malo es el villano,
que es terriblemente cliché, tanto sus motivaciones como su comportamiento son
propias de personajes que hemos visto cientos de veces. Se pudo haber rescatado
algo más al explorar su trasfondo trágico y su evolución a lo que es ya en la
película, pero el poco tiempo con el que se contaba lo impidió.
Como conclusión, Pokémon
Detective Pikachu es una película muy entretenida que vale la pena ser vista por
todo público, no es necesario ser fan de pokémon para disfrutarla porque va más
allá de ser una película sobre los videojuegos, sino es una película por si
misma con los personajes del videojuego en ella.
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