Venom Review

Venom es la película de Sony que inicia su universo de personajes de Spider-Man sin Spidey (unos genios). Está dirigida por Ruben Fleischer, quien es recordado por dirigir películas como Zombieland y Gangster Squad. En esta ocasión se encarga de liderar la cinta de uno de los villanos más icónicos del hombre araña con una historia de origen parcialmente reinventada para darle independencia al personaje. Está protagonizada por Tom Hardy, Michelle Williams, Riz Ahmed, Reid Scott y Michelle Lee.

La historia de la película toma de base el cómic de “Protector letal” donde Venom actúa más como un héroe. Eddie Brock (Tom Hardy) es un reportero con cierta fama que se encuentra con la oportunidad de entrevistar a Carlton Drake (Riz Ahmed), el líder y creador de la fundación Life, quien esconde un secreto que involucra la muerte de algunos inocentes al usarlos como objetos de experimentación con simbiontes extraterrestres. Brock, en su afán por acabar con esta situación, es infectado por un simbionte llamado Venom y juntos deberán crear un acuerdo para acabar con la maligna organización y sus planes que atentan contra el planeta.

La trama de la película es muy básica y sigue los lineamientos que dictan las películas de origen de personajes de cómics, donde el objetivo principal es introducir un universo y personajes nuevos mostrando lo que pueden hacer y dejando las bases para futuras secuelas. No es nada que nunca se haya visto, lo cual no sería malo, pero tratándose de una película con un personaje tan único y con tanto potencial como Venom, la historia puede resultar decepcionante si se tienen muchas expectativas.

El ritmo de la película es irregular, sus primeros minutos se sienten lentos y tortuosos hasta cierto punto gracias a la impaciencia que provoca ver a Venom lo más pronto posible. Una vez que el simbionte aparece en pantalla el ritmo aumenta considerablemente, haciendo pensar que todo pasa muy rápido.

Una de las peores cosas de la película es su pésima edición. Los cortes para adaptar la cinta a una clasificación PG-13 son evidentes e incluso afectan el curso de acción de ciertas escenas, principalmente en las de acción o peleas, ocasionando inclusive errores de continuidad.

Derivado de la problemática antes mencionada, seguir el hilo de ciertas secuencias se vuelve un tanto difícil, ocasionando momentánea confusión sobre lo que está pasando. Sin embargo, algunas escenas de acción están muy bien ejecutadas en cuestiones de coreografía y dinamismo.

Tom Hardy encarna a Eddie Brock exitosamente, a pesar de que el personaje tiene ciertas diferencias al del material original, mantiene su esencia por completo. El carisma de Hardy hace una excelente combinación con la identidad de Brock y su química con Venom es perfecta desde el primer minuto. Sin embargo, es imposible decir lo mismo de su relación con Anne Weying (Michelle Williams), la química que estos manejan es simplemente nula y las escenas que comparten se sienten un tanto forzadas. A pesar de que la actriz no hace un mal papel, la historia misma se encarga de que la relación entre ambos sea incomodidad absoluta.

Venom es grandioso como personaje, se respeta gran parte de su esencia en su etapa de antihéroe y el gran diseño físico del personaje está muy bien ejecutado. A pesar de que su origen en los cómics depende mucho de Spider-man, la historia logra ajustarlo muy bien a uno en solitario. Aunque también hay que decir que se debió explorar un poco más de su pasado para lograr fortalecer la identidad del personaje.

Esta película no es parte del UCM, pero algo en común que comparten esas películas (por lo menos en sus dos primeras fases): un mal villano. Riz Ahmed, quien interpreta a Carlton Drake, hace una decente actuación. Lamentablemente la historia decide ponerlo en un punto donde se mantiene como un simple villano genérico que sólo mueve piezas para conseguir su objetivo y no es hasta el tercer acto donde se involucra directamente. Su trasfondo es claro, pero débil ya que sólo es expuesto y no mostrado, así mismo la mayoría de sus diálogos sólo sirven para dar sentido a los aspectos científicos que pasan en la cinta, haciendo que se vuelva un personaje un tanto de exposición. A pesar de que el actor es bueno, su actitud intimidante no hace conexión con su físico ya que, más allá de carecer de un cuerpo corpulento que le haga competencia al de Hardy, no tiene un rostro intimidante que le dé más impacto a sus acciones.

Antes de hablar de los efectos especiales, hay que entender que 100 millones de dólares de presupuesto es muy poco para financiar una gran producción. Los efectos especiales son muy impresionantes considerando lo anterior y, a pesar de que presenta bajones muy notables en ciertas secuencias, son convincentes y llamativos. Además de que la cinta posee efectos prácticos muy bien ejecutados.

El humor es un elemento extrañamente explotado, sin embargo funciona de maravilla gracias al enfoque que tiene el personaje. Venom utiliza un humor sencillo que puede no ser muy efectivo para cierto tipo de espectadores, pero que se siente muy natural.

La dirección de Fleischer sigue las normas del género y no arriesga en experimentos, algunos planos de la ciudad de San Francisco son muy impresionantes pero ciertamente su trabajo se ve notablemente afectado por los cortes finales que buscaron eliminar la clasificación R de la cinta.

En conclusión, Venom es una película entretenida y divertida pero que es una pequeña muestra de todas las posibilidades que rodean al personaje. Es imposible no pensar en lo maravillosa que hubiera sido de haberse respetado la clasificación R que estaba presupuestada desde un inicio. Decepcionante vista desde un punto de vista con altas expectativas, pero de forma contraria cumple a secas como una película pasable y no tan memorable como debería serlo.

7