Bill y Ted 3: Salvando el Universo

Bill y Ted: Salvando el Universo, es la tercera parte de la excelente aventura iniciada en 1989. Está dirigida por Dean Parisot, escrita por Chris Matheson y Ed Solomon, los escritores originales y protagonizada por Keanu Reeves, Alex Winter, Samara Weaving, Brigette Lundy-Paine, Kristen Schaal y Anthony Carrigan.

Después de casi treinta años de su última película, Bill (Alex Winter) y Ted (Keanu Reeves) regresan para salvar al universo. En esta ventura, los dos amigos se encuentran viviendo una adultez marcada por sus experiencias anteriores, habiendo fallado en sus intentos por unir al mundo con una canción. Debido a esto, el tiempo y espacio comienza a colapsar. Bill y Ted tendrán que ponerse a la obra en medio de una crisis matrimonial para escribir la canción que restaure el orden, pero esta vez tendrán la ayuda de Thea (Samara Weaving) y Billie (Brigette Lundy-Paine), sus hijas.

Para revivir una franquicia que tiene décadas enterrada, una buena historia resulta crucial para justificar su regreso. A pesar de que esta tercera película no cuenta con una historia memorable, resulta una perfecta combinación entre diversión, nostalgia y aventura para ser una experiencia entretenida.

Bill y Ted cuenta con un humor muy característico marcado por las tendencias de su época, donde la torpeza y simpleza de las bromas era prioritaria antes de chistes complejos y de doble sentido. Treinta años después se respetan estos principios, provocando una especie de frescura en un genero que se ha perdido abusando de situaciones forzadas y contextos sexuales para hacer comedia. Este factor hace que la película sea más disfrutable y genere una sonrisa constante durante su hora y media de duración.

Es una película que para nada se toma las cosas en serio, por lo cual no hay mucho que resaltar sobre las actuaciones. Sin embargo, es importante señalar como tanto Keanu y Alex mantienen perfectamente la tonalidad y personalidad de sus personajes. Por otro lado, Samara Weaving y Brigette Lundy-Paine presentan dos personajes muy parecidos a sus padres, pero que logran tener una personalidad única y resulta interesante verlas ya que representan una especie de versión femenina, quizá no varíen demasiado en estilo cómico, pero pueden ser el camino para mantener viva esta franquicia en futuras secuelas.

Si existe algo de lo que se le puede recriminar a esta película son sus constantes intentos de hacerle honor a la cinta original. La misma historia se centra tanto en generar guiños y referencias, que incluso la subtrama en la que se envuelven las hijas de los protagonistas se encuentra enteramente inspirada en la película original. Tal vez esto no sea un elemento enteramente negativo, pero el nuevo contexto en el que se envuelven estos personajes podría demandar una trama un poco más fresca.

Como segundo aspecto negativo, la película mantiene un ritmo acelerado que no permite desarrollar de forma adecuada algunas de las relaciones e interacciones entre ciertos personajes, además de dejar algunos otros con participaciones bastante limitadas.

Al final, Bill y Ted Salvando el Universo es una película divertida que cumple su cometido de mantener vivo el legado de las películas originales respetando el espíritu de sus predecesoras. Keanu y Alex son tan divertidos como la primera vez y los nuevos personajes complementan de forma perfecta tanto a ellos como a la trama misma. A pesar de tener seguimiento con sus predecesoras, no es necesario haberlas disfrutado para pasarla bien viendo esta tercera parte y eso se agradece para que nuevas generaciones descubran estas maravillosas películas.

 7.5