Frozen
II, como su nombre lo dice, es la secuela de la que sigue siendo la película
animada más exitosa de la historia. De nuevo dirigida por Chris Buck y Jennifer
Lee, con un guion escrito por Lee y protagonizada por Kristen Bell, Idina
Menzel, Josh Gad y Jonathan Groff.
Han
pasado tres años de los sucesos que llevaron a Elsa a exiliarse del reino de
Arendelle y su regreso con la ayuda de su hermana Anna. Pero ahora algo en el
bosque ha despertado para llamarla a su encuentro. La Reina ahora tendrá que
hacer un viaje junto a Anna, Olaf y Kristoff para encontrar la razón de ese
misterioso llamado, viaje que la llevará a enfrentar su pasado y descubrir la razón
de sus poderes.
La
historia de Frozen II podría sentirse no tan fresca como la de su primera
parte, pero contiene muy buenos momentos. Sin embargo, se siente un tanto
perdida al momento de estructurar su narrativa, por momentos no se percibe que
la historia cuente con una dirección fija y existen algunos eventos que ocurren
simplemente para hacer avanzar la trama sin mayor explicación. Inclusive la
cinta tiene un cierto cambio de tono hacia el inicio de su tercer acto, donde
se nota un poco extraña la dirección que se decide tomar. Pero los números musicales,
que son fantásticos, hacen que la película se maquille un poco.
Las
canciones fueron una parte fundamental del éxito de Frozen en 2013, al punto de
que su tema principal, Let it go, siguió siendo popular hasta años después de
su estreno. Igual que en su antecesora, en Frozen II las canciones son
excelentes y, a pesar de que se cuenta con un tema principal, “Into the Unknown”,
todas las canciones tienen un brillo especial y transmiten de gran forma los
sentimientos e identidad de cada personaje que las interpreta.
Como
suele ser costumbre en producciones recientes de Disney, la animación resulta
ser el punto más fuerte de la película. Continuando con la tendencia en atención
a los detalles, pero también sumado a paisajes bellísimos y gran animación en
los elementos dentro de los mismos como el agua o el movimiento del viento.
Sorprendente y muy agradable de ver.
Como
conclusión, Frozen II es entretenida, pero que se queda por debajo de su
antecesora debido a una historia con un tanto de falta de claridad en su desarrollo
y un ritmo irregular. Vale la pena por sus piezas musicales y animación pero poco
valor se le puede encontrar para los que no fueron fanáticos de la primera película.
7
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