Logan
es la 10ma película en la franquicia de X-Men y la tercera del personaje
Wolverine en solitario. Está dirigida por James Mangold y protagonizada por Hugh
Jackman, Patrick Stewart, Dafne Keen, Boyd Holbrook y Stephen Merchant.
Es
el año 2029, los mutantes ya no existen. Logan (Hugh Jackman), con sus
habilidades de regeneración casi anuladas, trabaja para mantener con vida al
profesor X (Patrick Stewart). Todo cambia cuando Laura (Dafne Keen), una
mutante con habilidades muy similares a las de Logan, aparece requiriendo su
ayuda para poder escapar de una poderosa amenaza. Logan y el Profesor X tendrán
que aceptar la misión de salvar a la Laura y así dar una nueva oportunidad al
renacimiento de los mutantes.
James
Mangold dirigió, lo que para mi gusto es, una de las mejores películas de X-Men
en cuanto a realización: The Wolverine. Muy buena dirección, diálogos muy
profundos y, sobre todo, escenas de acción maravillosamente bien ejecutadas. Logan
mantiene esas bases: La dirección es muy buena, la manera en la que logra
capturar cada ambiente, cada escena y él cómo se conjunta con las actuaciones
es fascinante, tanto que hasta cierto punto se vuelve metafórico. Las escenas
de acción, muy a pesar de que en ciertos puntos abusan del “shaky cam”, son
perfectas porque aprovechan muy bien los recursos de cada personaje con coreografías
impactantes, además de que son crudamente violentas, lo cual fue un gran acierto.
La
violencia que se muestra en la película no llega a ser lo más fuerte a
comparación con otras películas del mismo giro, pero sí impacta la manera en la
que la ejecutan. Se siente natural combinándola con la ambientación dada a la
cinta, como parte de un mundo que ya es violento por naturaleza. Sin lugar a
dudas fue una muy buena decisión llevar a Wolverine a protagonizar una película
clasificación C, es un personaje que sabemos ha tenido mucho sufrimiento
durante toda la saga de X-men y el mostrarlo de esa manera refuerza toda la imagen
de Logan y nos lleva a entender mejor al personaje.
Hugh
Jackman da la mejor actuación en toda su carrera como Wolverine. Logra retratar
muy bien el cansancio y el dolor del personaje con sus movimientos, sus
expresiones y también en las mismas escenas de acción donde se nota el gran
esfuerzo que requiere para poder hacer si quiera un golpe. Apoyado, desde
luego, de un gran guión de James Mangold.
No
se queda atrás Charles Xavier, el personaje que quizá tiene mayor carga
emocional en toda la película. Patrick Steward retrata, una vez más, de manera
perfecta al profesor. No sólo es la actuación, sino lo bien escrito que está, tiene
un par de escenas que quizá hagan llorar a quien gusta de su historia y su
legado en el universo X-Men. Así como Hugh Jackman, es la última interpretación
de Steward como este personaje.
Dafne
Keen, a pesar de su corta edad (11), logra cumplir con el objetivo de retratar
a la sanguinaria Laura/X-23. Si bien no es una actuación tan sobresaliente como
sus co-estelares (totalmente entendible), sus escenas de acción son épicas. En
general fue una gran introducción a un personaje con muchísimo futuro dentro de
la franquicia.
Existe
un tercer mutante dentro del círculo de Logan: Caliban, interpretado por Stephen
Merchant, un personaje que si bien no fue el mejor escrito, logra generar
cierta simpatía al espectador por su papel en la cinta.
Quizá
el punto más flojo de la película es el villano. No es que estuviera mal
escrito, ni mal interpretado por Boyd Holbrook, simplemente no llena la exigencia
que requería la última película de Wolverine. A pesar de que hace cosas
importantes en la película, no llega a ser del todo imponente, ni tampoco una
amenaza por sí mismo, ya que trabaja en conjunto.
Otro
punto importante es el CGI, es algo que ha estado sufriendo FOX con los Xmen de
un tiempo acá y es que suele ser muy inconsistente. Mientas en unas escenas se
muestra muy impresionante, en otras se aprecia muy falso. Particularmente en
esta película tuve algunos problemas con el brazo robótico de Donald Pierce (Boyd
Holbrook), el cual se veía muy falso en el 90% de sus escenas.
Logan
es una película impactante, muy entretenida y con un gran valor emocional para
todos los que hemos visto esa saga desde su salida en los inicios de los 2000. La
violencia, la sangre y lenguaje fuerte, le suman un valor especial, ya que
fueron elementos que por años se esperaba ver en una película con Logan de protagonista.
A pesar de que la cinta llega a tener sus momentos muertos en cuanto a emoción
y acción, en ningún punto es aburrida. Es sumamente recomendable para todos los
amantes de los super héroes deseosos por ver algo diferente.
9.5
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