The Greatest Showman, o el gran
showman en este lado del mundo, es la película que relata la historia de P.T.
Barnum, quien fue el precursor de la industria cirquera a mediados de los 1800.
La película está protagonizada por un elenco bastante llamativo que incluye a
Hugh Jackman en el protagónico, Zack Efron, Rebecca Ferguson, Michelle Williams
y Zendaya. La dirección está a cargo del debutante Michael Gracey, quien hasta
hace poco se había dedicado únicamente a hacer efectos especiales.
La película es un musical, un género
que tiende a tener una estructura narrativa enfocada a las piezas musicales,
por lo que se tiene que apreciar de una manera muy particular. Viéndola como
eso, creo que es una película que se va a lo seguro, con una historia muy simple
que permite mayor libertad creativa a la hora de idear la música, haciendo que
no represente un agregado especial al género.
Las canciones son muy buenas y
trasmiten muy bien la situación y sentimientos que envuelven a los personajes
en cada escena que las contiene. Mayormente las piezas de baile están muy bien
ejecutadas, pero en un par de números se siente como un trabajo incompleto por
su poca espectacularidad, sin embargo cumplen muy bien su propósito de hacer un
poco más disfrutable la música y su letra.
Las actuaciones están bien, pero
resulta muy notorio como Jackman se roba la película por completo, haciendo que
el resto de las actuaciones luzcan un tanto inferiores.
La película tiene un ritmo acelerado,
lo que ocasiona que se concentre sólo en una línea argumental y ocasionalmente
tome un par de sub tramas que sirven para complementar la historia. Sin embargo
esto origina un pobre desarrollo de papeles secundarios, haciendo que muchos de
estos sean personajes simples de relleno que sólo intervienen en lo necesario.
Sólo los personajes de Zendaya y Zack Efron logran salir un poco a relucir pero
es debido a su historia de amor que la película aborda constantemente, también
se puede destacar sólo un poco el personaje de la mujer barbuda pero sólo
funciona para que el personaje de Jackman pueda tener una evolución dentro de
la trama. Este pobre desarrollo puede hacer que muchas personas (incluyéndome)
les parezca una película aburrida.
Por último, se puede destacar que la
cinta contiene un mensaje bastante claro que, aunque es uno que ya ha sido
abordado en muchas otras producciones, la película lo trasmite de una manera
más impactante con ayuda de Hugh Jackman y su carismática actuación. Es un buen
musical pero encuentra sus errores en una historia bastante simple con un
desarrollo muy limitado en varios de sus elementos, la idea principal no es
mala pero la ejecución deja mucho que desear.
7
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